Ansiedad

ME PRESENTO, ME LLAMO ANSIEDAD

Ansiedad

Hola, me presento,  soy la ansiedad, aunque creo que ya nos conocemos un poco. Bueno, realmente yo te conozco mejor a tí, que tú a mi, creo que te doy mucho miedo y que eso hace que quieras huir siempre de mi, y que no te detengas a conocerme, y claro, eso empeora mucho las cosas.

Lo primero que quiero que sepas, es que no soy el enemigo, realmente, lo único que quiero es protegerte, y lo que nos pasa es que como no nos conocemos bien, pues no nos entendemos. Por eso me he decidido a escribir este blog.

¿Sabes que llevo toda la vida contigo, con vosotr@s?, ¿Sabes que gracias a mi estamos hoy aquí?. Cuando se trata de detectar el peligro y reaccionar frente a él, soy la mejor.  Estoy casi igual que estaba en el cerebro de los primeros antepasado, pero claro de eso no te acuerdas. Te diré que realmente el cerebro no ha cambiado mucho y  de alguna manera somos como lagartijas emocionales

De verdad, nunca he querido hacer daño, ni volverte loc@, siempre he estado aquí para protegerte, y de hecho, realmente me necesitas.

Lo primero será ver que relación tengo con el miedo. 

¿Ansiedad?, ¿miedo?

¿Te imaginas estar tan tranquil@, sin inmutarte, ante el ataque de un grupo de fieras?. El resultado no sé si te gustaría. ¿o estar tan tranquil@ ante una avalancha?, ¿o estar tan tranquil@ en la alturas moviéndote como si nada?

Y no solo ese tipo de situaciones, que seguro que dirás, “claro, pero eso es muy exagerado”. ¿ y estar sin inmutarte ente un examen importante?, ¿o estar totalmente relajado ante una ponencia?, ¿y que me dices si se trata de pilotar un avión o participar en una carrera de motos?. Y en otro orden de cosas, ¿estar sin inmutarse en la primera cita con la personas que amas?.

Pues no sabemos muy bien lo que pasaría en todas esas situaciones, pero no estar alerta es probable que no llevase a buen puerto.

Dicen que el hambre agudiza el ingenio, y es verdad. Lo que se dice menos es que el miedo agudiza los sentidos, que es otra gran verdad. Y no solo agudiza los sentidos, nos prepara para afrontarlos, ya sea atacándolos y conseguir nuestros objetivos, o para huir si la cosa está muy fea.

AnsiedadEl miedo es problamente nuestra emoción más antigua y gracias a el hemos sobrevivido. ¿sobrevivir sin miedo?. Basta con echar un vistazo a como se comportan los animales, y cuando menos, parece que el miedo les es muy útil.

Pero claro, el miedo se caracterizada por una cadena de respuestas ante la la percepción de un peligro, real o supuesto, presente, futuro o incluso pasado, que no son precisamente muy agradables, más bien, todo lo contrario, la sensación es bastante desagradable. ¿Será para que no nos eternicemos disfrutando ante el peligro?. 

Nos sudan las manos, para agarrar mejor y poder trepar si es necesario. Se contraen los músculos, para tener mayor fuerza. Se reducen las respuestas de inmunidad, para responder menos en peino peligro. Se acelera la respiración, para transportar más oxígeno. Se acelera el corazón, para enviar más sangre a los músculos. Se ralentiza o para el proceso digestivo, que no estamos en ese momento para eso. Se dilatan las pupilas, conviene no perder detalle. La sangre se vuelve más densa, por si hay alguna herida. La adrenalina fluye que da gusto, …y un largo etcétera que como podemos ver, nada tienen de malo 

Y todo esto, en pleno siglo XXI, en la era tecnológica, prácticamente no ha variado nada, seguimos respondiendo igual.

Entonces, ¿que de malo tengo?. Ya he dicho que no soy mala. Me temo que la cuestión  se centra en estar continuamente en alerta, con miedo, y en el 99% de los casos, ante un peligro supuesto. Esa soy yo, la ansiedad. Uso el miedo para avisarte de que estar reaccionando a un peligro, pero como es un peligro supuesto, pues no es evidente, y por mucho que insisto, no se termina de afrontar a lo que realmente se teme.

 No hay nada tan característico del progreso desde la bestia hasta el hombre como la disminución de la frecuencia de ocasiones justificadas para sentir miedo”. 

William James

¿Qué soy entonces?, ¿qué es la ansiedad?.

Para entenderme, es necesario entender hacia donde ha ido evolucionando el ser humano. Todo momento histórico ha tenido sus cosas buenas y sus cosas menos buenas, y ele que ahora nos toca vivir, pues tiene sus particularidades.  

Son muchas las voces que dicen que vivimos tiempos difíciles. Eso al menos habría que discutirlo, pero lo que si parece cierto es que:

  • Actuamos como seres multitarea.
  • Tenemos que andar conciliando y haciendo malabares para que lo laboral, familiar y personal encaje.
  • El entorno es muy competitivo y exigente, al parecer, debemos ser padres perfectos, madres perfectas, trabajadores talentosos y supermotivados, debemos tener los dientes perfectos, la casa perfecta, hacer muchas cosas estimulantes, …, en fin, un no parar.
  • Como el día tiene 24 horas, vamos corriendo a todo, y claro, llega el estrés acumulado,Al parecer empezamos a dormir mal,….
¡STOP!

Cuántas responsabilidades a las que prestar atención, ¿verdad?.

Es como si hubiera que estar en un constante estado de alerta y preocupación. La familia, el trabajo, los amigos, la economía, la salud…y todas deben estar controladas para evitar posibles sorpresas desagradables y ser así felices 

Pues mucho me temo que ahí es donde entro yo, la ansiedad, para avisarte de que se ha entrado en un proceso de continua anticipación, de continua preocupación y ver “peligros” a diario.  De  querer   zanjar la  incertidumbre y reaccionar con miedo y verlo como peligroso o amenazante. 

Y claro, eso va acompañado de las respuestas físicas del miedo, que cuando son ,muy intensas no dejan que se  funcione de manera correcta en la vida cotidiana, lo cual viene a complicarlo un poco más.

Realmente el problema viene, y eso es lo que se me critica,  cuando ya no hay manera de salir de ese círculo vicioso y desconectar. Es como si el sistema de alerta se hubiera desconfigurado y ya no encontrara el punto de equilibrio. De hecho, algunas teorías  para explicar la ansiedad apuntan justamente a esto. Resumiendo, cuando el miedo bloquea, incapacita y nos hace sufrir interfiriendo en el día a día, es cuando se habla de mi. Eso es la ansiedad.Ansiedad

Y es tan importante encontrarle solución, que estudios recientes nos dicen que hasta un 20% de la población Española sufre o ha sufrido ansiedad, y todo apunta a que el dato sea mayor por las muchas personas que entienden que su salud mental no es algo a tratar/ cuidar y no solicitan ayuda profesional.

“Tomar decisiones cuesta, da miedo y  el miedo paraliza y ese parálisis produce una sensación general de pérdida de control  y/o desorganización”.

Rosa Becerril

¿Cómo saber si estoy? ¿ cómo saber si hay ansiedad?

Hay muchos y muy variados síntomas. Unos son físicos, otros emocionales, otros tienesn más que ver con comportamiento y muchos son cognitivos, mentales.

Como ya hemos ido comentando, realmente es una respuesta fundamental para la supervivencia, por lo que los componentes físicos son muy evidentes:
  • Hormigueo en extremidades, taquicardia, sudoración: Esto ya lo hemos mencionado, el cuerpo se prepara afrontar un peligro, real o anticipado, y en cuerpo no entiende de esa diferencia, y claro, si se mantiene en el tiempo, pues podemos llegar incluso a tener serias molestias musculares, problemas cardiovasculares, etc.
  • Problemas de sueño: dificultades para quedarte dormido o conciliar el sueño porque no paran de asaltarte preocupaciones. Es lógico, se supone que estamos en estado de alerta, y la cosa no está para dormir
  • Alteraciones gastrointestinales: Nuestro aparato digestivo también esta en alerta, y se ralentizan los proceso digestivos y alteran los procesos intestinales.
  • Problemas alimenticios: desaparición del apetito o atracones.
  • Alteración de la respiración: Se vuelve agitada y superficial. Esa “necesidad” de mayor oxigenación ante las respuestas de peligro, nos lleva lleva a una  respiración más rápida y superficial con la parte torácica, utilizando únicamente  la parte alta de los pulmones, con lo que tendemos a inhalar más oxígeno del que consumimos ey terminamos hiperventilando.
A nivel emocional y de sensaciones, estas no son muy agradables y por destacar las más relevantes
  • Tensión, Inquietud, nerviosismo, y agotamiento: La sensación es de estar continuamente pendiente, sin tregua, y claro, el cansancio y el agobio, terminan por imponerse y hacer cada día más difícil afrontar el día a día, con l que se genera un círculo vicioso fatídico
  • Angustia: Un sensación de verse atrapad@, querer salir y no poder.
  • Irritabilidad por tener que hablar con otras persona (reuniones de trabajo, hablar en público, asistir a una fiesta …).
  • Tristeza.
  • Mal humor.
  • Interferencia de en las relaciones sexuales. Bajo deseos sexual
Y como no, a nivel cognitivo, mental: 
  • Niveles elevados de preocupación y miedo constante: Una cascada de  pensamientos negativos que se agolpan en la cabeza sin parar.
  • Percepción de no tener el control y urgencia/necesidad por tenerlo
  • Pensar de manera frecuente sobre hechos negativos que ocurrieron en tu vida interfiriéndote en el presente.
  • Dificultades para concentrarse o memorizar.
  • Parálisis por análisis. Bloqueo a la hora de  tomar decisiones. 
  • Merma de la autoestima. Ideas negativas sobre un@ mism@ crecen cada día.

Por último, consecuencias a nivel de comportamiento:

  • Búsqueda continua de distracciones para evitar pensar
  • Evitación de situaciones: evitación de situaciones para no enfrentarse a ellas (no montar en ascensor, no acudir a reuniones sociales, etc).
  • Búsqueda de apoyo y ayuda continua. Pérdida de autonomía, por las dificultades para tomar decisiones, para concentrarse,…
  • En algunos casos pueden aparecer adicciones.

Son  muchos los formatos que puede tomar la ansiedad. Tal es así que en el DSM V , el Manual de referencia donde se recogen todos los diagnósticos de ”todas” la enfermedades mentales/psicológicas reconocidas, se detallan 10 maneras de manifestarme, en función de    donde este el origen de los temores y de estar en ese estado de de hipervigilancia:

A modo de esquema, ya iremos abordando en particular cada una en diferentes blogs, bajo ese cartel Ansiedad, tenemos:

  • Las fobias simples: Échale un vistazo a este blog, donde ya hablamos de las fobias. Aquí, entran el sin fin de fobias que existen: a las arañas (Arachnophobia), a las alturas, (acrofobia),  a los espacios cerrados (claustrofobia), miedo a volar (aerofobia), y un largo etcétera.
  • La Fobia Social o trastorno de ansiedad social: Se menciona aparte por su complejidad y especificidad. Es el miedo a exponerse ante otros, miedo al rechazo, miedo al ridículo.
  • Agorafobia: También se menciona aparte por su complejidad y especificidad. Es el miedo a los espacios abiertos
  • Trastorno de ansiedad por separación: temor intenso a separarse las personas con las que se tiene mucho vínculo. 
  • Mutismos Selectivo: bloque e incapacidad de hablar, en situaciones sociales donde seria esperaba hacerlo (p.e.: una reunión familiar).
  • Trastorno de Angustia: cuando aparecen, así, de repente, crisis de angustia, o lo que que antes se llamaban ataques de pánico, y luego, pues al menos un mes “muert@s” de miedo y con mucha inquietud e intranquilidad por la posibilidad de que se repita.
  • Trastorno de ansiedad Generalizada: Una inquietud, y preocupación excesivas y persistentes sobre una variedad de temas, que nos generan mucho malestar.
  • Trastorno de ansiedad inducido por sustancias: Como no, las drogas, ya sean naturales o sintéticas, siempre haciendo de las suyas. En algunas ocasiones el consumo, la intoxicación o bien la abstinencia de una sustancia o por la toma de medicación pueden producir serios desequilibrios como intensas respuestas de ansiedad.
  • Trastornos de ansiedad por enfermedad médica: No es lo más frecuente, pero algunas enfermedades pueden provocar sintomatología ansiosa.
  • Otros trastornos de ansiedad: el baúl donde entre bosque no entran en ninguno de los anteriores.

¿Por qué aparezco?.

Como ya desde el inicio del blog he repetido hasta la saciedad, en la mayoría de los casos, estoy para ayudar, para avisar de que algo no va bien, que seria interesante cambiar algunas cosas para desconectar el estado de alerta.

Pero como acabamos de decir, puede que algunas veces, haya una explicación física, biológica al porqué de la ansiedad.

Es posible, aunque infrecuente, que nos encontremos con alguna enfermedad que esté en la base de las respuestas de ansiedad, y por mencionar las más destacables:
  • Presentar alguna Enfermedad cardíaca
  • La Diabetes, por todas las alteraciones metabólicas que provoca
  • Problemas de tiroides, como el hipertiroidismo
  • Algunos trastornos respiratorios, como pueden ser el asma o  la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), pueden derivar en nerviosismo, irritabilidad,…
  • Alguna alteración que curse con dolor crónico o síndrome de intestino irritable
  • Algún Tumor, algo especialmente poco frecuente,  que por su localización altere la normal  regulación de las hormonas responsables de la reacción “lucha o huida”
Y puede que en ocasiones el consumo de drogas, o su abstinencia, o el mal uso o abuso de sustancias como pueden ser determinados fármacos, desencadena sintomatología ansiosa. 

Por mencionar algunos ejemplos

  • Abstinencia del alcohol, 
  • El mal uso y posterior abstinencia de medicamentos como la benzodiazepinas.
  • Fumar: El tabaco es una droga estimulante, aunque la mayoría de las personas fuman para relajarse, o creen que fumar, relaja. La nicotina es la principal causante. Es la sustancia psicoactiva del tabaco por excelencia y tiene un efecto muy importante sobre el sistema nervioso. Se absorbe rápidamente y llega en pocos segundos al cerebro y con fuerte poder adictivo. La abstinencia del tabaco, es una fuente de ansiedad muy importante, con lo que el círculo vicioso que dificulta su abandono esta servido.
  • La cocaína y el café. Poderosos estimulantes. Su propia actuación a nivel del sistema nervioso favorecen la posible aparición de respuestas ansiedad
  • Alcohol, cannabis,…, también pueden derivar en ansiedad, prjncipalmente por la respuesta de abstinencia.

Pero por lo demás, la gran mayoría de las veces, si hay ansiedad, si estoy presente, es porque algo en la manera de afrontar el día a día no funciona bien. Es decir que las causas psicológicas son las grandes protagonistas.

Puede que se hayan dado episodios traumáticos, momentos que se han vivido con una fuerte reacción emocional y donde la integridad física o psicológica han estado en peligro., y no solo la propia integridad, sino que puede que haya sido la de otra persona. Aquí son muchos lo ejemplos, como haber sufrido o haber visto un accidente grave, sufrir o ser espectador/a de  una agresión, una violación o abusos, haber sido víctima de maltrato físico o psicológico,…

AnsiedadEn esos casos estaré presente para ayudarte y “decirte” que ha pasado el tiempo y que en la cabeza, en la mente, en el sistema nervioso, se sigue reviviendo lo mismo de la misma manera, se alimente la idea de que el mundo es peligroso o que tú eres vulnerable. Nada de eso ayuda a seguir adelante, y ahora ya toca un cambio, aprender a reconocer las cosas y seguir adelante.

Puede que el “sistema” haya colapsado, que el estrés diario esté pasando su factura por los “servicios prestados”. En esos casos estaré con siempre para ayudarte, y que te detengas a revisar si esa inercia de tener que llegar a todo, de tener que hacerlo todo bien, de ser capaz de todo, merece la pena. Si ese miedo a fracasar, a fallar es sano y real. Si te compensa tener que aguantarme, o si es mejor ponerse manos a la obra. Es mi labor avisar

En otros casos será para avisarte de que seguir necesitando la aprobación y aceptación de los demás, de hacer lo imposible para agradarles; de dejar que sean los demás los que decidan por ti renunciando a ti, te lleva a estar siempre en alerta ante un posible rechazo y lo peor, a no estar a gusto contigo mism@, y eso no es bueno y genera mucho malestar.

Muchas veces tendré que acudir para ayudarte a que aprendas que no puedes controlarlo todo. Esa necesidad de seguridad implica atar demasiados cabos, muchos de los cuáles están fuera de tu control. Toca aprender a lidiar con la incertidumbre, y llevarse bien con ella, tratar de eliminarla, además de imposible, es agotador.

También es agotador convivir con la idea de que el mundo y la gente son peligrosos, y que ante esa tesitura, toca estar siempre alerta. Conviene revisar también este enfoque, por eso a veces lo que tengo que recordar es esto precisamente.

Mientras no lo hagas… aquí seguiré.

En definitiva y como conclusión, si hoy estoy aquí, es porque me necesitas. Es porque por ti mism@ no te has dado cuenta de que hay algo en la manea en que has aprendido a afrontar tus responsabilidades, tu vida, que te hace daño y aleja de estar bien. Así que por favor, no te asustes,  agradece que esté y observa de que “peligro” te estoy avisando.

Y claro, a partid de ahí, toca trabajar para cambiarlo y pedir ayuda, que será en la mayoría de los casos lo mejor que puedas hacer.

¿Cómo librarte de mi? ¿Se puede eliminar la ansiedad? – Tratamiento

Claro que se puede eliminar la ansiedad, en cuanto aquello que te mantiene alerta aprendas a eliminarlo, mi misión hablar concluido y me iré.

Un primer paso esencial es que aprendas a conocerme, a conocer la ansiedad, a entenderla y saber porqué está y para qué.  Así que habrá que trabajar en esta línea y por lo tanto en aprender a aceptarla y aceptarte.

Habrá que aprender técnicas de relajación que ayuden a reducir los síntomas más molestos y a que todo transcurra más despacio nivel cognitivo. En este apartado, la medicación puede ser de ayuda y una muleta importante en un inicio, sobre todo si los niveles de ansiedad están muy disparados.Ansiedad

Y por supuesto, aprender con todos los recursos y las técnicas cognitivas necesarias para aprender a reestructurar y afrontar de manera alternativa aquello que esta siendo la fuente de la ansiedad.

La ansiedad es un síntoma de que algo no va bien, y afortunadamente, se conoce mucho y muy bien sobre los mecanismos de la ansiedad y porqué está presente. No es necesario sufrirla!!

Estamos aquí para ayudarte.

4 comentarios
  1. DeVidaMente Dice:

    Gracias siempre a vosotr@s por vuestro comentarios.

    Sin duda, la ansiedad está cada día más presente en la vida de más personas.
    Es evidente que la velocidad de los cambios a los que las personas debemos enfrentarnos parece estar sobrepasando a los recursos que tenemos para afrontarlos y se complica la gestión de las emociones. Seguiremos trabajando cada día para ayudar a reequilibrar esos “desajustes”.
    Desde aquí, ánimo y fuerza a tod@s los que se puedan encontrar desbordad@s por la ansiedad. Con trabajo, dejará de ser protagonista en sus vidas. Gracias de nuevo por sus comentarios, son un motor más para seguir adelante.

  2. Elena Dice:

    Es muy duro convivir años con ansiedad, lo explicáis muy bien, y ahora con el problema que hay aún cuesta más,. Cuando he leído vuestro escrito me he sentido identificada, es agotador, aún siendo consciente de que el peligro real no existe cuando entras en el bucle cuesta salir

  3. DeVidaMente Dice:

    Gracias por tus comentarios Elena. Para nosotros es la mayor satisfacción posible que pueda ayudarte de alguna manera lo que publicamos. Con ese único objetivo lo hacemos.
    Te entendemos perfectamente, es agotador, claro que lo es.

    Un paso importante es aceptar el hecho de que la ansiedad este presente, déjala “entrar”, y a partir de ahí, identificar, organizar y trabajar aquello que no deja que la ansiedad se vaya.

    Siéntete en la confianza de consultarnos lo que puedas necesitar. Ánimo!!!

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